Todo el tiempo llegan pacientes al consultorio con mucho dolor y una cajita de color en sus manos contando que su odontólogo les confeccionó una placa para dormir, pero sus dolores no se van.

El punto es que, la plaquita (mal llamada de relajación o de bruxismo) de uso nocturno, está confeccionada sin realizar un diagnóstico, como si todos los pacientes tuvieran exactamente el mismo problema, las mismas articulaciones y hasta los mismos dientes, siendo ésta no más que un plástico interpuesto entre los dientes, para evitar que durante el rechinamiento estos se dañen.

El DIO (Dispositivo Intra Oral) solo puede ser confeccionado después de un preciso diagnóstico de la ATM considerando a cada paciente como único y con características propias.

La importancia del  diagnóstico de la ATM/DTM

Para los profesionales de la Escuela Neurofisiológica lo principal antes de comenzar un tratamiento de ATM es realizar un diagnóstico de la ATM:

• Con la RNM (Resonancia Nuclear Magnética) podemos evaluar la presencia del disco articular,  su relación con la cabeza o cóndilo mandibular y la posición del disco articular durante los movimientos de apertura y cierre de la boca.
• Con la TAC (Tomografía Computada)  podemos estudiar la integridad del tejido óseo y su relación con la cavidad glenoidea y el oído.
• Y con un análisis de sangre la presencia de algunas bacterias que nos pueden llegar a generar sintomatología.

Esta investigación diagnóstica de la ATM puede llevarnos dos o más encuentros (según sean necesarios) para poder estudiar al paciente y su disfunción. Una vez realizado el diagnóstico podemos comenzar con un tratamiento.

Entonces ¿cuáles son las características del DIO con la técnica neurofisiológica?

Investigación diagnóstica de la ATM

La Técnica Neurofisiológica utiliza tecnología de última generación para posicionar vertical y sagitalmente la mandíbula en una posición fisiológica mediante la desprogramación electrónica de los músculos maseteros y la correcta posición de los músculos masticadores.

Entonces se estudia de manera integral al paciente y su afección para llegar a un diagnóstico, o sea, a encontrar el origen de la enfermedad que afecta la articulación del paciente. Con el diagnóstico listo se confeccionará el DIO, el cual tendrá las características especificas que requiera el caso, siempre considerando a cada paciente diferente a los demás.

La altura de nuestro DIO está diseñada con la ayuda de equipos tecnológicos, los cuales toman registros gráficos que podemos leer en la computadora. Por este motivo puede suceder que su tamaño sea distinto de un lado que del otro, ya que va a tratar la patología de cada una de sus Articulaciones Temporomandibulares. Durante el tratamiento de ATM podemos usar y cambiar de DIO todas las veces que consideremos necesarias.

La función del DIO es devolver el espacio articular perdido (generado por la patología), posicionar correctamente los músculos masticadores y del cuello y también descomprimir la ATM para permitir que el disco articular vuelva a su lugar, el cóndilo se posicione correctamente, y no comprima el oído y los vasos y nervios que discurren por la zona.

Todo esto para evitar la sintomatología descripta por los pacientes como ruidos o chasquidos articulares, dislocación mandibular, trabaduras, dolores de cabeza, cuello y oído.

El DIO y el tratamiento de ATM – Dos cosas diferentes

Conociendo la estrutura de la ATM

Es importante entender que el dispositivo en si, no es el tratamiento. El tratamiento de la ATM tiene varias partes, y el mismo puede comenzar solo con un completo y correcto diagnóstico para cada paciente, sin excepciones. De esta manera es posible identificar la causa del problema, y plantear un tratamiento el cual tendrá un seguimiento y será distinto en cada caso.

Por eso la diferencia más importante entre las plaquitas de bruxismo y el DIO que utilizamos es el estudio y diagnóstico del paciente, ya que no es posible colocar un DIO sin estudiar con profundidad al paciente.

Sin diagnostico, no es posible saber cual es el problema que se esta intentando tratar y tampoco saber si hay progreso en el tratamiento o no.

Por eso, la diferencia mas importante entre las plaquitas para bruxismo y el DIO que utilizamos, no es solo en el tipo de dispositivo, si no el procedimiento desde el diagnostico hasta el tratamiento.